Ollantaytambo trata de un típico ejemplo de la extraordinaria planificación urbana de los incas, y por ello un punto obligado de visita para quien esté interesado en esta civilización.
Sus callejuelas empedradas y serpenteantes, las ruinas diseminadas por doquier y sus terrazas agrícolas son atractivos que destacan por sí mismos y el visitante lo puede apreciar en todo su esplendor. Entre las ruinas, es recomendable la visita a la antigua fortaleza y al templo, donde podemos apreciar magníficas vistas del Valle Sagrado de los Incas.